Cómo prevenir los resfriados y otras enfermedades contagiosas en las guarderías
Las guarderías traen consigo una gran cantidad de beneficios para los niños: aprenden a socializar, a compartir, desarrollan la empatía con otros niños, etc. Sin embargo, también arrastran con ella una gran cantidad de enfermedades infecciosas. Los niños en la guardería pueden llegar a sufrir gripe, resfriados, otitis, bronquitis o laringitis, entre otras patologías. Por eso, desde Todo Familias te explicamos cómo prevenirlas.
Es importante recalcar que estas enfermedades ayudan al desarrollo del sistema inmunológico de los niños, ya que que el hecho de enfrentarse a este tipo de virus de peques les permitirá adquirir cierta resistencia posterior antes los efectos de los mismos.
El contagio es prácticamente inevitable. Los virus se contagian principalmente por la saliva y por el contacto. Lo único que pueden hacer los padres es prevenir lo máximo posible la transmisión, no contribuyendo a que el virus se propague aún más.
Consejos para prevenir las enfermedades infecciosas en las guardería.
– Vacuna a tus hijos: virus como la gripe o el coronavirus no tienen cura, por lo que vacunar a los más peques de estas enfermedades puede ayudarlos a paliar los síntomas.
-Mantener una buena higiene: es importante que los niños se laven las manos cuando vienen de la guardería. Esto, junto con otros hábitos de higiene como cortarle las uñas, limpiar la ropa y los juguetes de forma habitual ayudará a prevenir el contagio.
-Vigilar cualquier signo de enfermedad en los peques: si en algún momento notas que está enfermo o podría estar incubando algo, trata de mantenerlo en casa. No solo por el bien de tu hijo, sino que también para evitar propagar los virus al resto de peques de la guardería.
-La lactancia materna: darle el pecho a los bebés les provee de anticuerpos. Estos actúan como ‘vacunas naturales’ ante los virus.
–Enseña a los niños a no compartir vasos, botellas, cepillos de dientes o cualquier otro utensilio por el que pueden producirse un intercambio de saliva.
–Descanso y buena alimentación: recuerda que un niño bien nutrido y que descansa los suficiente será menos propenso a coger enfermedades. Y si las cogiese el periodo de curación se realizaría más rápido
Recuerda que es importante no administrar ningún tipo de antibiótico a los niños, a no ser que estos sean prescritos por un médico en casos muy específicos. La mayoría de estas enfermedades son bastante comunes, por lo que suelen desaparecer solas y sin producir grandes daños.
En Todo Familias recomendamos que, ante cualquier duda de enfermedad, se acuda a un médico. Para saber más sobre pediatras a los que acudir cerca de tu zona, consulta nuestro repositorio de pediatras en Todo Familia.
