Cómo prevenir los piojos y las liendres en los niños, medidas y consejos
La pediculosis, o infestación del cabello por la presencia de piojos o liendres, es muy común en los niños. Cada año los padres deben cuidar a sus hijos de los contagios que se dan sobre todo en las escuelas. Por este motivo, a continuación te traemos una serie de medidas para prevenir y controlar la aparición y proliferación de estos parásitos en el pelo.
En primer lugar, hay que tener en cuenta que los piojos y demás insectos del cabello no transmiten ninguna enfermedad. Pero sí pueden producir molestias, picores e irritaciones en la piel cuando los peques se rascan la cabeza. Además, la pediculosis no se produce porque el pelo esté más sucio o limpio, eso es un mito muy extendido que los profesionales desmienten. Tampoco depende del lugar de origen o de residencia de la persona (campo o ciudad, un país u otro…).
Consejos para evitar el contagio de piojos y liendres
Una de las primeras medidas que se deben adoptar para evitar los contagios de piojos y liendres es rehuir el contacto cabeza con cabeza. Aunque estos parásitos no pueden volar ni saltar como comúnmente se cree, sí se pueden arrastrar y pasar de un cabello a otro. Por tanto, es conveniente explicar a los niños que deben evitar este contacto directo con sus compañeros en clase, en actividades extraescolares, jugando, etc.
Utiliza peines de púas finas o lendreras especiales para peinar el pelo de tu hijo. Así podrás estar más seguro de que su cabello está libre de piojos y, en caso de encontrar alguno, podrás tratarlo cuanto antes. Realiza estas revisiones frecuentemente y en el caso de que el niño o niña tenga el pelo largo, lo mejor es que se lo recojas cuando salga o vaya a clase.
Evita que tu hijo o hija comparta sus cosas personales como cepillos, peines, toallas, gorras, gorros, diademas, coleteros, bufandas, etc. Y también que utilice los de los demás. Asegúrate de lavar toda la ropa a más de 50 ºC para eliminar cualquier tipo de infestación. Es muy recomendable también limpiar y lavar los peines, cepillos y otros utensilios para el cabello con agua bien caliente. De esta manera se desinfectan naturalmente y se reduce el riesgo de contagio.
Cuando se producen muchos casos de piojos en las escuelas, los profesores y maestros alertan a los padres y madres para que estén más atentos. En este momento, para tener más seguridad, puedes aplicar repelentes especiales para piojos y liendres en el cabello de tu hijo. Consulta con el farmacéutico o con el médico para poder elegir productos de calidad y que no dañen su cuero cabelludo.
Qué hacer cuando hay síntomas de pediculosis
La señal más evidente de que el niño tiene piojos o liendres es la picazón en ciertas áreas de la cabeza. Las zonas cercanas a las orejas y al cuello son las más sensibles y donde suelen establecerse estos parásitos. Para comprobarlo, debes sentar a tu hijo en una habitación muy bien iluminada. Después de separar su cabello en secciones, inspecciona atentamente cada mechón. Los piojos, y sobre todo las liendres, son muy difíciles de ver a simple vista debido a su pequeño tamaño y rapidez.
Estos insectos suelen estar pegados al cuero cabelludo y tienen un color cercano al blanco o al marrón. Para diferenciarlos de la caspa, comprueba si están adheridos firmemente al pelo o no. Por último, utiliza una lendrera o un peine de púas muy finas para cepillar cada parte del pelo, que debe estar mojado.
En el caso de que alguien de la familia tenga ya pediculosis, deben tomarse medidas para prevenir que se propague a los otros miembros. En primer lugar, debe evitarse el contacto directo con el cabello del infestado. Luego hay que aislar todos los objetos y la ropa usada hasta 48 horas antes de descubrir los piojos o liendres. Pueden lavarse con agua muy caliente, o bien meterlos en una bolsa bien cerrada durante al menos tres días. Los parásitos del cabello no pueden vivir mucho más tiempo sin alimentarse de la sangre de su huésped, por lo que morirán pasado ese período.
Si tu hijo o hija se ha contagiado de pediculosis, puedes tratarlo tú mismo en casa con productos especiales recomendados por el médico o la farmacia. Pero también puedes acudir a centros especializados en la eliminación de piojos y liendres o contratar un servicio a domicilio. Encontrarás ambos casos en nuestro directorio de Todo Familias, solo debes hacer clic en el enlace.
