¿Cómo preparar a los peques para ir al logopeda?
Los bebés suelen comenzar a hablar al cabo del primer año de edad. Empiezan por los monosílabos y poco a poco, comienzan a decir palabras más largas. Si esto no sucede, es posible que empieces a notar ciertas señales que indican que tu hijo necesita ir al profesional que se encarga de los problemas del habla y la voz: el logopeda. Una vez obtengas la cita a este médico, es necesario preparar con antelación la visita, pues supone una experiencia nueva para tu niño. Desde Todo Familias te ofrecemos algunas pautas que puedes seguir a la hora de llevar a tu peque al logopeda.
1. Habla con tu hijo
Principalmente, debes comentarle lo que va a pasar y cómo es el sitio al que va a ir. No es lo más correcto llevarle sin avisar y que se lleve la sorpresa cuando ya esté allí. Hay que explicarle que el logopeda es una persona que os va a ayudar con la mayor naturalidad posible. Si tú sientes que es algo negativo o estigmatizante para él, no es de extrañar que tu pequeño lo perciba así. También sería bueno decirle que es un lugar en el que va a aprender cosas nuevas, aunque la naturalidad es clave para persuadirle.
2. Demuestra que tienes confianza en el logopeda
Algo muy importante es transmitir la seguridad a tu hijo de que el profesional es de fiar. De lo contrario, no se sentirá cómodo y no querrá seguir sus instrucciones. Puedes decirle que el logopeda te lo ha recomendado su profesora, por ejemplo, ya que, posiblemente, te propongan algunos en su centro escolar. Eso le hará estar seguro de que no hay nada que temer cuando vayáis a visitarle.
3. No le obligues a esforzarse
Probablemente, tu hijo se sienta presionado e incómodo durante la visita, ya que, de una manera u otra, le vais a al forzar a hacer algo que le resulta difícil. Por tanto, al principio lo ideal es no meterle presión la primera vez. Es posible que llore o coja una rabieta, pero es inviable que deje de recibir la ayuda del logopeda, pues lo necesita. Sin embargo, aunque es mejor no forzarle en la primera visita, en las siguientes hay que insistir más para que el tratamiento que necesita sea efectivo.
4. Evita los comentarios negativos
No es lo más adecuado explicarle al logopeda las dificultades o las conductas negativas de tu hijo cuando él esté delante. Lo que podría hacer esto es aportarle desconfianza e inseguridad. Es mejor centrarse en los aspectos que puede mejorar y reforzarlos de manera positiva. Por ello, cuando lleguéis a su consulta, lo ideal es tratar la visita de la forma más normal y factible posible.
Si desconoces cuáles son las señales que advierten que tu hijo o hija necesita ir al logopeda, puedes pinchar en el enlace para descubrirlas.
Además, si necesitas consultar a un especialista para que te dé más información, no te pierdas nuestro consultorio de logopedas infantiles.
